"Hago todos los días mi "ratito" de oración: ¡si no fuera por eso!" (Camino, 106)

21 de enero de 2015

MIERCOLES de la 2a Semana del tiempo ordinario

Marcos 3,1-6.

Jesús entró nuevamente en una sinagoga, y había allí un hombre que tenía una mano paralizada. 

Los fariseos observaban atentamente a Jesús para ver si lo curaba en sábado, con el fin de acusarlo. 

Jesús dijo al hombre de la mano paralizada:
 "Ven y colócate aquí delante". 

Y les dijo: 
"¿Está permitido en sábado hacer el bien o el mal, salvar una vida o perderla?". 

Pero ellos callaron. Entonces, dirigiendo sobre ellos una mirada llena de indignación y apenado por la dureza de sus corazones, dijo al hombre: 
"Extiende tu mano"

El la extendió y su mano quedó curada. Los fariseos salieron y se confabularon con los herodianos para buscar la forma de acabar con él.